No empezaré en orden. Esta es la experiencia que me ha dejado sin voz propia y con el mayor de los temores mezclados con una dicha que es difícil describir. Empecé a leer cuando tenía once años. Un domingo de Pentecostés; hasta el día de hoy sigo haciéndolo (No pregunten la edad). Uno de los sacerdotes de mi parroquia decía: "Asústese el día que no tenga miedo de leer", y es cierto, aun con muchos años de experiencia siento mariposas cuando tomo un micrófono. El miércoles 18 de enero visitamos Santa María de Tulpetlac, en el Estado de México. El Santuario donde la Virgen de Guadalupe visita a Juan Bernardino y realiza el milagro de sanación en este hombre, tío de San Juan Diego. El lugar es referencia para pedir intercesión por los enfermos. Llevaba varias peticiones desde Costa Rica de muchas personas que en fe piden por su sanación, y con mucho cariño las llevé y las puse en oración, después de todo, para mí uno de los mayores actos de amor es pedir a Dios por al...